Con un marco importante de participantes, comenzó a dictarse el pasado miércoles 7 en nuestra UTN San Francisco el curso de “Bobinado y prueba de motores eléctricos de inducción de baja tensión”, destinado a especialistas bobinadores, electricistas, calculistas junior y toda persona interesada en el tema.
Esta propuesta de capacitación se extenderá durante tres meses, y está a cargo del ingeniero Omar Gallo, el ingeniero Diego Ferreyra y Eduardo Pazzarelli.
Al referirse a este nuevo curso, Gallo destacó que “el sector de los bobinadores acompaña desde hace muchos años a la industria. Desde que apareció el motor eléctrico, a fines del siglo 19 hasta la actualidad el bobinador es el reparador del motor eléctrico que mueve la industria, y en un sector que es muy importante, fundamental para que la industria siga trabajando y que a veces no es tan visible. El bobinador, el reparador de motores, es como un apoyo invisible para la industria”.
“Nos parece bien dar algo a este sector, entregarle nuestra experiencia, darle un valor agregado a sus conocimientos, o simplemente refrescarle lo que ellos saben, darle más herramientas para que ellos sobrevaloricen su trabajo, para que puedan defender ante la gran industria que suele subvaluar su trabajo”, comentó el ingeniero, y aclaró que “lo que tratamos de hacer es darle algo práctico, útil, que sirva para ellos, que conozcan los por qué de lo que están haciendo a diario. Este trabajo tiene mucho de oficio, prácticamente todo, hay cosas que se transmitieron de uno a otros, de los más antiguos a los más jóvenes y a veces se transmiten los conocimientos sin los por qué. Se manejan mucho con los esquemas de bobinado, las fichas o los datos de bobinado, que guardan como un tesoro. Pero nuestra idea es ofrecerles un poco más, que sepan por qué se usan determinados materiales, el por qué de algunas conexiones, diferencias entre bobinado de dos y cuatro polos, de qué manera se pueden hacer, y cuál es más simple, es decir temas de la práctica, darles algo que les guste, que les interese y les sirva”.
Pazzarelli agregó que con este curso se busca “agilizarles lo que están haciendo y que tengan más conocimientos sobre los materiales y lo que se está utilizando en la actualidad”.
Por su parte Ferreyra detalló: “El proceso de bobinado de motores en muchas industrias, a gran escala, se fraccionó mucho y entonces hay gente compenetrada en una tarea, mecanizada, sin una visión global de todo el proceso. Hemos formado a personas que no tenían una visión global del proceso ni una justificación de por qué hacían lo que hacían ni qué venía después de su tarea. Entonces queremos que comprendan los parámetros mínimos con los que alguien diseñó ese bobinado. Este no es un curso de diseño de bobinado ni de diseño de motores pero sirve para interpretar datos de bobinados, saber implementarlos y comparativamente tomar decisiones”.